La clamidia, causada por la bacteria Chlamydia trachomatis, es una infección de transmisión sexual que puede afectar tanto a hombres como a mujeres. Afecta con más frecuencia a personas menores de 25 años. Esta infección se propaga principalmente mediante el contacto sexual sin protección, ya sea vaginal, anal u oral.

 

Síntomas de la clamidia

Es necesario detectar la clamidia de forma temprana para evitar complicaciones a largo plazo. Desafortunadamente, la mayoría de las personas infectadas con clamidia no experimentan síntomas evidentes, lo que hace que la infección pase desapercibida. Sin embargo, en algunos casos, los síntomas pueden manifestarse después de una o dos semanas de la exposición. Estos síntomas pueden incluir:

  • Dolor al orinar.
  • Secreción anormal: tanto en hombres como mujeres, puede haber una secreción anormal de los genitales.
  • Dolor abdominal: en mujeres, la clamidia no tratada puede causar dolor abdominal bajo.
  • Dolor durante las relaciones sexuales: puede haber molestias o dolor durante el acto sexual.

 

Prevención de la clamidia

Es fundamental destacar que la clamidia puede afectar la salud reproductiva si no se trata adecuadamente. En mujeres, puede provocar enfermedad inflamatoria pélvica, que a su vez aumenta el riesgo de infertilidad y complicaciones durante el embarazo. La prevención de la clamidia se basa en prácticas sexuales seguras y la conciencia de los riesgos. Aquí hay algunos consejos para minimizar el riesgo de contraer esta infección:

  • Uso de preservativos: el uso consistente y correcto de condones es una medida eficaz para prevenir la transmisión de clamidia y otras ITS.
  • Pruebas regulares: es esencial realizar pruebas de ITS de manera regular, especialmente si se tiene una vida sexual activa o se cambian de pareja sexual. No hay que olvidar que, como hemos mencionado en el apartado anterior, la clamidia no siempre provoca síntomas visibles, por lo que una prueba de ITS periódica ayudaría considerablemente a la detección temprana.
  • Limitar el número de parejas sexuales: reducir el número de parejas sexuales disminuye el riesgo de exposición a la clamidia y a otras infecciones de transmisión sexual.
  • Educación sexual: la información y la educación sobre las ITS son excelentes herramientas para aumentar la conciencia y prevenir la propagación de las ITS.

Las pruebas de clamidia están disponibles en la mayoría de farmacias. Son opciones accesibles y discretas para realizar chequeos de ITS. Estas pruebas suelen ser sencillas de usar y ofrecen resultados rápidos, lo que permite una detección temprana y un tratamiento oportuno. Además, recomendamos tener muy presente la importancia de cuidarse durante las relaciones sexuales, para prevenir este tipo de infecciones.